Por: Miguel Mata
La policía del Caribe en Países Bajos (KPCN) confirmó que el cadáver hallado con varias puñaladas hace unos días pertenece a la poblana Adriana Morales de Florencio, lo cual ya fue confirmado por sus padres quienes acudieron a Bonaire con la esperanza de encontrar a su hija aún con vida.
De acuerdo al portal “Bonaire Nieuws”, el jefe de la división de investigación de la KPCN, Henry Hambeukers, confirmó que la estudiante murió presuntamente apuñalada.
Tras desmentir que la detención del presunto sospechoso de su asesinato haya sido clave para ubicar el cuerpo, mencionó que las condiciones climáticas de la isla jugaron en contra para poder identificar el cuerpo ya que este entró en descomposición de forma muy rápida, aunado a que se encontraba en una fosa de poca profundidad en una finca de Playa Grande.
Henry Hambeukers señaló que hasta el momento la investigación sigue abierta ya que no se ha logrado establecer un móvil del crimen y no se ha logrado establecer la cronología de los hechos y lo que ocurrió con Adriana tras desembarcar en la isla.
Es importante recordar que Adriana se encontraba realizando sus prácticas profesionales para la empresa Royal Caribbean en el “Navigator of tve Seas”, que era su segundo crucero y el pasado 20 de abril desembarcó en la isla de Bonaire como parte de su día de descanso.
En tierra firme Adriana desapareció y no fue sino hasta el pasado viernes fue detenido un presunto responsable de su desaparición de iniciales R.S. y un día después se ubicó el cuerpo de la joven en la finca Playa Grande.
El cuerpo estaba en avanzado estado de descomposición lo que complicó identificar los tatuajes que Adriana tenía en el brazo y hombro derecho, por lo que fueron finalmente los padres quienes identificaron los restos.
