Aunque el nuevo Hospital de Traumatología y Ortopedia “Doctor y General Rafael Moreno Valle” se encuentra a unos minutos de donde ocurrió el accidente múltiple reportado el pasado viernes sobre la autopista Puebla–Córdoba con sentido a Veracruz, donde murieron ocho personas y 26 más resultaron heridas, la inoperancia del nosocomio hizo imposible su traslado para una pronta atención médica.
De haber estado en funcionamiento el sanatorio, que fue inaugurado ostentosamente por el gobernador del estado, Rafael Moreno Valle, el pasado 2 de febrero, las personas afectadas por el choque en el que estuvieron involucrados nueve vehículos compactos, tres tráileres y un autobús de pasajeros pudieron haber sido trasladadas a esta unidad médica para agilizar las labores de rescate.
Paramédicos de la Cruz Roja Mexicana consultados por esta reportera mencionaron que las víctimas de los accidentes automovilísticos son designadas a hospitales más cercanos para su pronto auxilio, tomando en cuenta la disponibilidad y ocupación de los sanatorios.
La vialidad en que ocurrió la tragedia es la misma ruta sobre la cual se encuentra ubicado el dispensario; sin embargo, ante la inoperancia de éste los heridos fueron trasladados al Hospital Betania.
Por la naturaleza de la colisión las instalaciones y específicamente la unidad de quemados pudieron ser aprovechadas para preservar la vida de las personas.
Los hechos ocurrieron el pasado viernes alrededor de las 14 horas en el kilómetro 145 de la autopista Puebla–Orizaba, a la altura de la caseta de Amozoc.
Se presume que un camión de doble remolque perteneciente a la empresa Coca Cola frenó de forma abrupta, provocando que un autobús de la línea AU se impactara en la parte trasera del primero. De forma inmediata otro tráiler chocó a gran velocidad con el trasporte de pasajeros, desencadenando una explosión e incendiando así las tres unidades.
Se dice que la quema de pastizales fue el origen del percance, pues obstaculizó la visibilidad del chofer de la firma refresquera, lo que desencadenó, además, una carambola de 10 vehículos.
El saldo oficial es de ocho personas fallecidas y 26 heridos, aunque al principio se manejó la versión de 20 individuos muertos, en su mayoría por calcinamiento.
Al lugar acudieron rescatistas de la Cruz Roja, paramédicos de SUMA, Bomberos, Protección Civil del Estado, Policía Federal y del estado, así como elementos del Ejército Mexicano.
Testigos indicaron que la mayoría de las personas que perecieron eran las personas que viajaban en el autobús, cuyo conductor quedó prensado al volante y murió. Por su parte, otros conductores lograron bajarse de sus vehículos para resguardarse.
Los heridos de gravedad están siendo atendidos en el Hospital Betania, localizado en la capital poblana.
El mismo viernes la Secretaría General de Gobierno (SGG) del estado envió un comunicado de prensa sin mencionar el número de heridos y los fallecidos en el accidente; solo se limitó a informar que los hechos provocarían el cierre de la vialidad, por lo que el bloqueo sería levantado a primeras horas del día sábado.
Fuente: La Jornada de Oriente