En Acatzingo fue levantado y más tarde hallado muerto en una barranca y con el tiro de gracia un “padrino” de un anexo de Alcohólicos Anónimos (AA) que en vida respondía al nombre de Jaime y temía 38 años de edad.

Los hechos ocurrieron cuando varios hombres con armas de alto poder llegaron hasta el anexo de AA ubicado en la calle Ruperto Sánchez Taboada, para llevarse privado de su libertad a Jaime.

Familiares y amigos realizaron la denuncia de su desaparición y en redes sociales se difundió su ficha de búsqueda con sus datos generales, sin embargo horas más tarde vecinos del anexo reportaron a la policía que habían escuchado varios disparos.

Al llegar al punto policías municipales solo encontraron manchas de sangre y partes de masa encefálica.

Casi 24 horas después, pobladores hallaron el cuerpo de una persona en una barranca de 80 metros de profundidad y tras extraerlo comprobaron que era el cadáver de Jaime.

Se presume que los sicarios lo asesinaron frente al anexo y después lo arrojaron en esa barranca.

Las investigaciones las llevan a cabo agentes ministeriales del grupo de apoyo de la Fiscalía General del Estado en Acatzingo.